A través de una publicación en el sitio web oficial de la Universidad, se comparten los detalles de este accesorio peculiar, que podría describirse como una suerte de carcasa o funda metálica, compuesta por titanio y niquel, capaz de inducir el estado eréctil del miembro gracias a la inducción de calor distribuido a través de su estructura.
Pero el procedimiento para implantarlo en el órgano se antoja complicado y doloroso de ver. Al menos si se juzga su estructura sin conocer a fondo los detalles técnicos:
Esta aleación de metales se mantiene flexible y flácida a temperatura ambiente, pero se vuelve rígida al aplicarle calor, lo que la convertiría, en teoría en una solución funcional para combatir este problema, informó Fayerwayer.
Pero existe un pequeño conflicto. Ya que los investigadores no han descifrado todavía como pueden aplicar calor sobre el implante sin tener que recurrir a una batería o a sumergir el miembro del usuario sobre agua caliente.