El Centro de Operaciones de Emergencias (COE) mantiene este domingo nueve provincias en alerta roja, dieciséis en amarilla y cinco en verde, debido a las lluvias e inundaciones provocadas por el huracán Melissa, que ya alcanza vientos sostenidos de 220 kilómetros por hora y continúa generando acumulados significativos sobre suelos saturados.
Provincias bajo alerta
En nivel rojo permanecen Barahona, San Cristóbal, Independencia, San José de Ocoa, Monte Plata, San Juan, Azua, La Romana, San Pedro de Macorís, Peravia, Pedernales.
En alerta amarilla, el COE mantiene al Gran Santo Domingo , Bahoruco, La Vega, Samaná, Hato Mayor, Sánchez Ramírez, El Seibo, Monseñor Nouel, Duarte, María Trinidad Sánchez, Santiago Rodríguez, Espaillat, Santiago, La Altagracia y Elías Piña.
Mientras que verde están Dajabón, Hermanas Mirabal, Montecristi, Valverde y Provincia Duarte.
El organismo explicó que las alertas responden a la alta probabilidad de inundaciones repentinas urbanas y rurales, crecidas de ríos, arroyos y cañadas, así como deslizamientos de tierra. También instó a la población a no cruzar corrientes ni acudir a balnearios debido a la turbidez y el volumen de agua acumulado.
Operaciones en la presa de Valdesia
El Instituto Nacional de Recursos Hidráulicos (INDRHI) informó que mantiene vigilancia permanente sobre las principales presas del país, con especial atención al complejo Jigüey–Aguacate–Valdesia–Las Barías, donde se realizan maniobras de regulación por la crecida del río Mahomita
Estas operaciones incluyen la turbinación de excedentes en la central de Valdesia para evitar sobrecarga y permitir el manejo controlado del caudal.
Las autoridades advirtieron a las comunidades ubicadas aguas abajo —entre ellas Los Mineros, Los Naranjos, El Rosalito, Mucha Agua, La Mancha, Yaguate, Pizarrete y Las Barías— a mantenerse alertas y seguir las orientaciones del COE y los organismos de protección civil.
El Indrhi y la Empresa de Generación Hidroeléctrica Dominicana (Egehid) aseguraron que las presas están en condiciones de laminar el caudal esperado y que las operaciones de generación continua buscan mantener los niveles dentro de las reglas de seguridad hidráulica.