Caraballo fue arrestado y acusado por la policía y los fiscales pocos días después del homicidio y enfrenta cargos por asesinato y posesión de un arma peligrosa.

El crimen se produjo hace ocho días, el viernes pasado, pero los detalles emergieron el miércoles.

Novo a quien sus compañeros islámicos le rindieron honores en la mezquita y redes sociales, fue velado el martes en una funeraria de Lawrence.

Dejó a su esposa somalí Zahra Nur Warsame, también islámica y tres hijos que procreó con ella.

Novo es el segundo difunto sepultado en la recién abierta sección para muertos islámicos en el cementerio de Spring Grove Road y frente a la Meca.

Los musulmanes rezan cinco veces al día afuera de la mezquita.

Caraballo reside en Nashua, New Hampshire y está recluido en la cárcel del condado Middleton.

Los investigadores no detallaron el motivo de la pelea entre los dos hombres que desapartaba Novo.

Se dijo que unas 100 personas incluida su madre, asistieron al funeral de Novo pero ningún oficial electo estuvo a pesar de que el dominicano islámico era un destacado activista comunitario que abogaba por el cese de la violencia armada la imposición de la paz.

Kemal Bozkurt, ex asistente del director de la biblioteca pública de Lawrence y uno de los amigos más cercanos a Novo, se quejó de la ausencia de los oficiales electos a los funerales.

Recordó que Novo fue un honesto trabajador de la construcción y demolición viviendo más de 20 añ

os en Lawrence.

“Cuando escuché la noticia, me quedé impactado”, dijo Bozkurt en una entrevista con el periódico local Eagle Tribune.

“Su sueño era acabar con toda violencia. Desafortunadamente, fue asesinado por un criminal en la violencia”, dijo Bozkurt.

Nasser Abdullah escribió que "en verdad pertenecemos a Allah y en verdad a Él volvemos".

 “Deberían reconocer a este hombre”, dijo. "Deberían hacer algo por este gran hombre".

Novo vivió en Lawrence durante más de 20 años y trabajó en la construcción y demolición.

Bozkurt expresó su preocupación por el video del sangriento altercado que se cobró la vida de su amigo y que apareció casi de inmediato en las redes sociales.

"La gente estaba grabando y haciendo videos en vivo en Facebook, en lugar de ayudar y tratar de separarlos. “He visto el video, es muy triste", añadió.

"Oremos juntos para poner fin a la violencia en Lawrence y más allá”, exhortó Bozkurt.