- “Esto proporciona al Congreso las herramientas legislativas necesarias para derogar y reemplazar el Obamacare”, decía el portavoz republicano, Paul Ryan. “Es un primer paso crítico que alivia a los estadounidenses que luchan contra esa ley. Nuestro objetivo es un sistema centrado en el paciente, que tenga más opciones para elegir, un menor costo y un mayor control sobre la cobertura”.

- “Los republicanos te dirán que sí, que te darán algo mejor”, replicaba la demócrata Maxime Waters. “Pero, han estado diciendo eso durante 8 años, y no presentan un remedio. Ha luchando contra el llamado Obamacare durante 8 años y siguen sin un plan, ¿Por qué no lo tienen?, ¿por qué no tienen nada? No tenían nada cuando empezaron a atacar el Obamacare. Y no tienen nada hoy”.

El Senado aprobó iniciar la derogación el  pasado jueves.

La reforma sanitaria emprendida por Obama permitió acceder a una cobertura médica a unos 22 millones de personas en Estados Unidos. Paradójicamente, los Estados en los que ganó Trump, que ha prometido trabajar para abolir el Obamacare  desde su “primer día” en el Despacho Oval, fueron los más beneficiados.